Blind date o... nada es azar

Historias, historias, y una nueva historia. Cuando el cielo no pinta lindo. Cuando hay gente que al perder cree que pierde por culpa de otros, cuando uno no se hace cargo de sus propias elecciones, cuando le grita a quien no corresponde, el resultado a veces puede ser que haya quien quiera servir de chivo expiatorio. A otras no nos gusta. Damos un paso al costado y seguimos el camino amplio y luminoso como siempre lo fué.
Nuestro camino sigue bifurcándose y no lo transitamos solos. Y surgen otros caminos y otra gente. Y así casualmente redescubro gente que crucé brevemente por el msn. Y lo breve se volvió intenso. Y lo intenso se tornó necesario. Y lo casual dejó de serlo. Y a ambas el 12 nos une. A ambas un 24 hizo que tuvieramos un voz que nos acercara. Y así los pares, las docenas, las canciones, los tonos, las cadencias, las insinuaciones, el deseo, fue acercándonos.
Casualidad, curiosidad, o simplemente un hola no dejó que quedase en eso solo.
Nuevamente juego con el azar y la emoción se hizo presente.